Tarta Cámara Canon

Nooo, no sólo hago tartas infantiles siempre me lo preguntáis en los mails y si que reconozco que la mayoria de mis tartas, cookies y cupcakes van dedicadas a los más peques de la casa y yo encantada, pero reconozco que es con el tipo de tartas como la que hoy os enseño con las que más disfruto!!

Pido desde aquí disculpas al Sr. Canon, no intento plagiarle nada pero si como mínimo se le parece algo a la original ya me doy por satisfecha

Cuando Judith me encargó la tarta para su marido (que por cierto, les difuminé las caras en la fotografía para preservar su intimidad, no son hologramas!!!) tuve clara la respuesta, me apetecía muchisimo hacerla ya que 2 semanas antes también hice una parecida, pero las fotos se perdieron en una tarjeta de memoria que decidió quedarse encastrada en el lector y no pude compartirla con vosotros así que hoy si, hoy os enseño desde 0 como elaborar este tipo de tartas que despiertan, cuanto menos, curiosidad y no, no es tan difícil

• Madeira Sponge Cake de vainilla (receta)
• Buttercream de café (receta)
• Fondant de cacao (receta)
  
  

El bizcocho, una vez que lo elaboramos y esté frío totalmente lo envolvemos bien en papel film, unas 3 vueltas y lo metemos en el congelador, mínimo 24 horas, de esta manera nos será mucho más fácil poder tornearlo sin que se nos desmigue.

El día que lo montamos, lo sacamos del congelador y seguimos los pasos que os explico a continuación

Retiramos el papel film, le cortamos la barriga al bizcocho para nivelarlo y con esta parte que retiramos es con la que iremos rellenando parte del bizcocho para darle el aspecto 3D.

Partimos el bizcocho por la mitad, colocamos una parte sobre la otra y le cortamos uno de los bordes para redondear el bizcocho. El trozito que cortamos lo utilizaremos para hacer el visor de la cámara.

Ahora colocamos el otro bizcocho redondo que hará de objetivo y con un descorazonador de manzanas, cortamos el bizcocho como véis en la fotografía para simular el diseño de la cámara original.

Con un rallador, de los que usamos para rallar el limón, lo pasamos por el bizcocho para redondear las esquinas y con un pincel vamos retirando los restos de migas que van cayendo.

Por último, vamos añadiendo recortes de bizcocho, de la barriga que recortamos al principio, en la parte de arriba hasta conseguir darle forma al visor.

Y después de reducir el bizcocho redondo con un aro de emplatar, así es como nos queda el bizcocho torneado y tenemos lista la mitad de nuestra tarta

Os enseño la pedazo de chuleta que tenía, no os penséis que tornearla fue una inspiración divina que me vino así de repente

El siguiente paso es rellenarla y cubrirla y esta vez de una Buttercream de café

Primero ponemos un poco de BC sobre la base para evitar que se nos mueva la tarta mientras la rellenamos y cubrimos.

En vez de almíbar, añadí un poco de leche al café que me sobró de la BC y con eso fui calando cada parte del bizcocho que corté en 2 y rellené mientras cubría también los laterales.

Ya sólo nos queda cubrir toda la tarta y al final debería quedar algo como lo que véis, en los trozos que queráis redondear más le añadís más BC y listo.

Para conseguir que os quede lisa, ir mojando la espátula en agua caliente.

La metemos en la nevera, peró veis la foto? Pues ni caso El sueño ya me podía y le enganché el objetivo pero ya se lo podeis quitar!!
El objetivo lo ponemos hacia arriba, lo cubrimos tambien de BC y lo dejamos aparte de la cámara, así luego cubriremos por un lado la cámara y por otro el objetivo.

Preparamos ahora el fondant, que al ser de cacao nos costará muchisimo menos teñir de color negro.

Cubrimos la tarta y con paciencia le vamos dando la forma pegandola bien. Por otro lado forramos el objetivo y lo pegamos a la cámara pincelando la zona con un poco de agua.

Vamos añadiendo los detalles, recortamos las piezas y las pegamos de la misma manera, pintamos en plata las piezas que lo requieran y ya sólo nos queda ir poniendo botones, que por cierto, no se como se aclaran pero esta cámara lleva mogollón de ellos!!

Para darle el último toque y que parezca más real, le ponemos una fotito en la pantalla, no?

Primero ponemos un poco de pegamento comestible sobre el fondant y pegamos un trozo de papel de horno, volvemos a aplicar pegamento y colocamos la foto que habremos plastificado previamente. Presionamos unos segundos y lista.

Para terminar, el pulso y la paciencia harán el resto, pintamos con colorante y rotuladores comestibles los detalles para hacer que nuestra cámara sea lo más real posible y ya solo queda una cosa . . . .

Di . . . . PA-TA-TA!!!!!

Gracias Judith por confiar en mi, espero que sorprendieras a Joan y disfrutárais muchisimo del día como mínimo lo mismo que disfruté yo haciendo vuestra tarta.